La familia Robben fue otra de las tantas que padecieron al coronavirus en el mundo del fútbol y que incluso tuvieron que atravesar por una fase dura. En este caso Arjen, el ex delantero neerlandés con pasado en Groningen, PSV, Chelsea, Real Madrid y Bayern Múnich, relató el calvario que sufrió su esposa, Bernardien, por culpa de la pandemia.
"Llegó a sentir mucha presión en el pulmón al respirar. El último test al que se sometió dio negativo, por suerte, y poco a poco vuelve a sentirse mejor. Estuvo fatal", explicó Robben en una entrevista a la web del club alemán.
El oriundo de Bedum, Groninga, también aprovechó la oportunidad para agradecerle a las personas que lo apoyaron y ayudaron en ese difícil momento: "Tenemos unas amistades envidiables. Como no se podía salir de casa, ellos nos hacían la compra y la dejaban delante de la puerta de casa, para que saliéramos a recogerla".
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