Desde las convocatorias de Riqui Puig, hasta la confianza en Ansu Fati, este ha sido el recorrido de la cantera en el primer equipo desde la llegada de Quique Setién al Fútbol Club Barcelona.
Quique Setién llegó a la ciudad condal con una premisa clara: reubicar a un Fútbol Club Barcelona en circunstáncias devolviéndole parte de ese ADN que tanto le ha caracterizado en estos últimos años. Con el libro de estilo de Johan Cruyff bajo sus hombros, el técnico cántabro aterrizó en Can Barça como el reflejo más puro del legado guardiolístico, tras su paso por clubes como el Real Betis Balompié o la Unión Deportiva Las Palmas. Una de las señas de identidad que compartía con el maestro holandés era su fijación en la cantera. De ahí, sus primeras visitas al Miniestadi nada más llegar, echando un vistazo a los Riqui Puig, quien entraría en su primera convocatoria tras ser apenas utilizado por Ernesto Valverde, y compañía.
Ansu Fati, principal emergencia
Una fijación, que sin embargo se ha ido moldeando con el paso de sus partidos como técnico culé, y centrando sus ideas a partir de las necesidades de su Barça. Bien es cierto que las lesiones se han postulado como el guión perfecto para dar entrada a jóvenes del Barça B como el propio Riqui Puig, Ansu Fati, Ronald Araújo, Álex Collado, entre otros. Todos ellos han sido parte de la mayoría de convocatorias de Setién, pero por otro lado, no han obtenido su recompensa. No el caso del jovencísimo Ansu Fati, quien explotó sus primeras cualidades en el primer equipo de la mano del "Txingurri" también se ha ganado el corazón de Quique Setién desde la llegada del cántabro al banquillo culé.
Ansu Fati se postuló el único jugador titular en los cinco primeros compromisos de Setién junto al francés Antoine Griezmann, acumulando 431 minutos, por los 422 que le había otorgado Ernesto Valverde en su primera etapa con el primer equipo. Sin embargo, en los últimos partidos, y tras la llegada de Martin Braithwaite al elenco culé, en vistas al calendario competitivo que se venía encima, el santanderino ha relegado a una posición menos trascendental a la promesa azulgrana. El principal motivo es quizás la plaga de lesiones que ha afectado al conjunto culé en las últimas fechas, que también sucumbió en el extremo de diecisiete años, y ante su juventud, Setién prefiere dosificar a su perla.
Riqui Puig y Ronald Araújo, en la trastienda
Menos importante ha sido el papel de Riqui Puig, que se postulaba como la "niña de los ojos" del nuevo entrenador blaugrana, y que de hecho entró en la primera lista de Quique Setién para enfrentarse al Granada, pero que sin embargo ha ido perdiendo de manera enigmática relevancia en el primer equipo. La principal explicación la encontramos en que el centrocampista catalán supone una de las bazas para el Barça B que dirige Javier García Pimienta, y a diferencia de Ansu Fati, no se ha situado desde principio de curso en dinámica del primer equipo. Fruto de ello, la alternancia de apariciones en convocatorias que ha tenido el mediocampista de Matadepera, junto a su compañero de filial Álex Collado, en las listas de Setién. El sabadellense, uno de los pilares del Barça B, sacó a relucir su calidad con el primer equipo ante un hueso duro de roer como el Valencia, nada más y nada menos que en el campo de Mestalla, en sus primeros minutos con el primer equipo. Desde entonces, Setién ha recurrido en más de una ocasión al "7" del filial a pesar de no brindarle una confianza excesiva como la que sí ha depositado en Ansu Fati. Collado emergió como sustituto de Riqui Puig en cuanto al protagonismo, tras los papeles del de Matadepera ante el Granada y el UD Ibiza, y desde entonces logró desbancar a su compañero.
Por su parte, otro de los nombres a los que se ha visto forzado, en este caso por las debilidades defensivas, a recurrir Quique Setién ha sido el del central uruguayo Ronald Araújo. Tres centrales del primer equipo entre algodones, con Gerard Piqué y Samuel Umtiti como principales damnificados en la lista de lesionados y un titubeante Clement Lenglet han hecho que Setién ponga sus ojos en el central del Barça B, que precisamente llegó a la ciudad condal como comodín para los dos equipos. Hasta cinco veces lo ha incluído el técnico cántabro en sus listas, otorgándole minutos de calidad en retrimiento de una desgastada zona defensiva del conjunto blaugrana. Con Ronald Araújo, ya son 6 los futbolistas del Barça B que han jugado de la mano de Quique Setién, lista en la que también debemos incluir al cedido en la Roma, Carles Pérez, quien finalmente no contaría con la confianza del técnico cántabro en favor del refuerzo de Martin Braithwaite.
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