La "operación regreso" se antoja complicada

Ya se ha convertido en costumbre el hablar de los exleones repartidos por Europa como posibles refuerzos del Athletic. Cada verano se especula con el regreso de varios futbolistas al conjunto bilbaíno, aunque de momento no se ha dado ninguno de ellos. Ander Herrera, Fernando Llorente y Javi Martínez siempre aparecen en las quinielas, algo que no será diferente el próximo verano. Sin embargo, solo el último parece tener opciones reales de cambiar su actual club por el Athletic.

Su importancia en el Bayern ha ido bajando con el paso de los años, al igual que su rendimiento. Es por ello que el club bávaro no pondría ningún impedimento a su posible salida el próximo verano. Está viviendo un año en el que las lesiones no le están dejando tener continuidad y su etapa en Alemania parece estar más cerca que nunca de su final.

Los de casos de Fernando Llorente y Ander Herrera son diferentes. El delantero ya fue descartado por el propio presidente Elizegi en el pasado mercado de verano. Desde el club prefieren apostar por Villalibre y no taparle con un ariete veterano. Además, la actual plantilla cuenta con hasta cuatro delanteros, tres cuando Aduriz se retire. Una cantidad más que suficiente.

Herrera, por su parte, ya ha manifestado que su ilusión es volver a Zaragoza. Eso si, para ello tendría que salir del PSG y eso es una auténtica lotería. El conjunto galo gestiona de manera extraña sus salidas, por lo que tiene las mismas opciones de salir que de quedarse en París. Su poco protagonismo se debe más a las lesiones que a otra cosa y esto puede hacer que sus minutos aumenten cuando esté al 100%.

Laporte y Kepa son opciones fuera de mercado para el Athletic. Otro nombre a tener en cuenta es el de Alex Berenguer. No es un exleón, pero se le ha vinculado con el club bilbaíno en los últimos años. Su temporada en Italia está siendo buena, pero no ha sido el jugador que ha rescatado al Torino en su pésimo inicio de 2020. Además, el presidente del Toro, Urbano Cairo, es un duro negociador y lo pondrá difícil para dejar salir al futbolista por una cantidad inferior a los 10 millones que ya pidió al Athletic el pasado verano.