Los jugadores se ejercitaron de forma suave incidiendo en las presiones y posesiones. Mariano, única ausencia. Zidane no quiere sustos a estas alturas.
El Real Madrid ultima su preparación de cara al gran partido de la temporada. El viernes, en el Etihad (21:00 horas, Movistar Liga de Campeones) estará en juego más de media campaña. La consecución de la 34ª Liga es una realidad, pero el gran desafío viene ahora, con la visita al Manchester City de Guardiola. Sólo vale la victoria marcando más de un gol.
El equipo se ejerctió esta mañana en la Ciudad Deportiva alejándose de grandes desgastes y centrándose en el trabajo con balón. El entrenamiento empezó con series de posesión y control de pelota. Proseguidamente, Zidane dividió al equipo en varios grupos para realizar ejercicios de presión. Los porteros se marcharon a hacer entrenamiento específico. Por último, los jugadores formaron tres grupos para hacer partidos en dimensiones reducidas.
Mariano fue la única ausencia. El delantero continúa aislado en su domicilio particular recuperándose del contagio por coronavirus. En la sesión entrenaron con total normalidad tanto Isco como Bale, confirmando que están recuperados de los golpes que les apartaron del verde hace escasos días. Zidane podrá contar, de momento, con toda su plantilla salvo Mariano y Ramos en el Etihad.
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