El 27 de mayo del 2001, Fernando Torres debutaba con 17 años con la camiseta del Atlético de Madrid ante el Leganés, en el Vicente Calderón.
Tal día como hoy, con un Atlético inmerso en la lucha por ascender a primera división, debutó un joven delantero de Fuenlabrada, de nombre Fernando Torres. Fue Luque el encargado de darle el relevo, y así el canterano con el 35 a la espalda saltaría al césped y empezaría a escribir su historia con la rojiblanca. Finalmente, ese año el Atlético no conseguiría ascender, quedándose a las puertas por diferencia de goles con el Tenerife.
Al año siguiente, con un Torres ya consolidado, el Atlético conseguiría subir a primera quedando campeón de Segunda división. 5 temporadas más estaría "el Niño" con los de la ribera del Manzanares, hasta que se marchó al Liverpool.
El Atlético de Torres, no era el Atlético de ahora, era un equipo de mitad de la tabla, cuya máxima aspiración era clasificarse para la ya extinguida Intertoto, con el fin de llegar a Europa. Fueron 5 campañas en primera y dos en segunda las que estuvo el fuenlabreño en su primera etapa en el club madrileño.
Jugando lejos de casa, le llegarían los éxitos con la selección española, aunque aún no desempeñándose con la elástica rojiblanca, los aficionados le sentían como el representante del Atlético de Madrid de aquella España bicampeona de Europa y campeona del Mundo. Dicha selección no contaba con ningún jugador del Atlético de Madrid, aunque los atléticos sentían a Torres como suyo, y este correspondía. Como cuando en el autocar de la Eurocopa 2008, en las celebraciones, Torres portaba una bandera española con el escudo del Atlético de Madrid, y en el mismo vehículo dos años más tarde con el éxito del Mundial, de nuevo el escudo de su Atleti, esta vez en una bufanda.
Durante sus años fuera del club, se empezó poco a poco a cimentar el Atlético campeón, empezando por la Europa League conseguida ante el Fulham en Hamburgo, y el subcampeonato de Copa del Rey también de ese mismo año. Ese Atlético fue comandado por Quique Sánchez Flores. Tras la salida de Sánchez Flores, el Atlético volvió a entrar en un periodo convulso de resultados, hasta que llegó Simeone y le otorgó una nueva dimensión al club, ganando títulos, y poniéndole a competir de tú a tú con los equipos más grandes del viejo continente.
Mientras, Torres se convertiría en el mejor delantero centro del mundo en el Liverpool, viviendo los mejores años de su carrera. Para luego ser traspasado al Chelsea con el que sería campeón de Champions en 2012, y campeón de la Europa League en 2013, ademas de también ganar una FA Cup.
Con ya el Atlético en otro estatus futbolístico se enfrentó tres veces contra ellos, en las que perdió las tres. Primero fueron unas semifinales de Europa League cuando vestía la camiseta del Liverpool, luego en una Supercopa de Europa, en la que de nuevo mordió el polvo ante sus exs, esta vez siendo jugador del Chelsea. También siendo jugador "blue" volvió por tercera vez a perder contra su Atleti, esta vez en semifinales de Champions en 2014.
En el año 2015, Torres regresó al Atlético de Madrid, siendo consciente de que el Atlético al que volvía tenía poco o nada que ver con el Atlético del que se marchó. Estuvo 3 temporadas y media en esta segunda etapa, en las que logró su sueño y objetivo que se había marcado al volver, ganar un título con el equipo de su vida. Así lo hizo ganando la Europa League 2018, y levantándola al cielo de Lyon junto a Gabi.
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